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Acción Familia rechaza modificación del Código Penal

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Comunicado de Prensa

Acción Familia no puede dejar de estar en contra del proyecto de ley que busca la derogación del artículo 373 del Código Penal que condena a quienes ofenden a la moral y las buenas costumbres.

La iniciativa impulsada por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) contó con el patrocinio de nueve parlamentarios de la Concertación, por lo cual se debe entender que su objetivo es permitir las manifestaciones de conductas homosexuales en público.

Si bien que este artículo del Código Penal que busca reprimir los atentados contra la moral y las buenas costumbres casi no está siendo aplicado, al menos su existencia tiene una importancia educativa.

En efecto, si la ley considera que existen atentados a las buenas costumbres y a la moral, ella afirma que existe una moral objetiva que debe ser respetada y costumbres malas que deben ser reprimidas.

Por lo anterior, la derogación del artículo da una pésima señal, pues afirma implícitamente que no existe la moral objetiva y que cada uno de los ciudadanos puede comportarse como le plazca en público. Lo que en otras palabras es la promoción de la inmoralidad de forma descarada y ostensiva.

La moral no se sustenta exclusivamente en normas legales, ella nace de convicciones religiosas y de resoluciones firmes de la voluntad. Sin embargo cuando la ley no las reconoce, lo que está promoviendo es precisamente la disolución de los principios religiosos que la sustentan.

El proyecto que pretende derogar el artículo 373 hace referencia a las bases religiosas que lo inspiraron y las considera obsoletas. De esta manera tal derogación prepara el terreno psicológico para una futura persecución contra todos aquellos que defienden la vigencia de la virtud, que en este caso concreto es la virtud del pudor.

En la lógica de los Parlamentarios promotores de esta moción los que deben ir a la cárcel no son aquellos que atentan contra la moral, en la cual no creen, sino precisamente quienes se empeñan en mantener un marco de convivencia social decente basado en la virtud, es decir los católicos que toman en serio la religión.

Santiago, 13 de diciembre de 2007

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14/12/2007 | Por | Categoría: Prensa, Revolución Cultural

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