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Análisis del Proyecto de ley sobre los derechos del niño y del adolescente

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V.- El sistema de «delación» de los padres por grupos de presión

Ese carácter marxista de lucha de clases en el interior de la familia es realzado por el sistema de «delación» que el Proyecto introduce.

Al crear una «acción especial de protección de derechos de la infancia y adolescencia», el Proyecto, en sus artículo 21 establece que «cualquier niño, niña o adolescente, o cualquier persona en su nombre, aun cuando no tenga poder ni cuente con patrocinio de abogado, podrá interponer la acción a que se refiere el artículo anterior», la cual se substanciará «en forma preferente a cualquier otro asunto».

Ese dispositivo contradice el declarado propósito de evitar la «judialización» de los conflictos, al fomentar las denuncias y exigir una intervención casi inmediata.

El Proyecto establece que estas denuncias podrán establecerse, “ por causa de actos u omisiones arbitrarias o ilegales, (en las que el menor) sufra privación, perturbación o amenaza en el legítimo ejercicio de alguno de los derechos o garantías reconocidos “[14].

La enumeración de las circunstancias es intencionalmente vaga pues ella no se refiere sólo a actos, sino también a omisiones que puedan “perturbar” o “amenazar” los derechos del menor, es decir se refiere a hechos no realizados sino hipotéticos y no sólo con relación al orden jurídico sino también a los derechos de carácter «económico, social y cultural de la infancia”.

Además, el Proyecto da poder a cualquier persona a interponer la acción, inclusive aquellas enteramente ajenas a la vida de la familia y sin calificación para juzgar de la propiedad o impropiedad de la iniciativa (puesto que no es siquiera necesario el patrocinio de un abogado).

Como «cualquier otra persona que tenga un interés legítimo en el resultado de la acción, podrá hacerse parte» en el proceso, podemos desde ya imaginar el celo de ciertas ONGs y otros grupos de presión para hacer denuncias y participar de procesos en nombre, por ejemplo, de inexistentes derechos sexuales y reproductivos o de supuesta violación de la consciencia de adolescentes por causa de las convicciones religiosas de sus padres.

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05/07/2005 | Por | Categoría: Revolución Cultural
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